Cuando alguien dice que habla de Parte de Dios y que hace Milagros para probar que sus afirmaciones son ciertas, los cristianos tenemos todo el derecho y responsabilidad de probar a aquellos que lo afirman  (1 Juan 4:1; Ap. 2:2). Muchas personas están surgiendo hoy afirmando tener dones milagrosos, diciendo que los dones milagrosos de la Biblia son para nosotros hoy. Algunos citan pasajes como Marcos 16:17-20; Juan 14:12,13; y Hebreos 13:8. Ellos piensan que no hay diferencia entre el primer siglo y nuestro presente. Nuestro propósito es preguntar por qué dio Dios dones milagrosos, cómo los obtenían las personas, si cesarían de existir y qué diferencias hay entre los sanadores de tiempos modernos y las sanaciones de las cuales leemos en el Nuevo Testamento.

 Primero, el Señor dio los dones milagrosos a los hombres para confirmar la predicación del evangelio por los apóstoles y profetas (Marcos 13:20; Hebreos 2:3,4). Estas señales milagrosas eran prueba o garantías de que hablaban la palabra de Dios con la aprobación de Dios. Dios dio a Moisés una vara milagrosa con este mismo propósito (Ex.4:1-5), “por esto creerán que se te ha aparecido Jehová, el Dios de tus padres, el Dios de Abraham, Dios de Isaac y Dios de Jacob.” Sin embargo, el escritor del libro de los Hebreos nos dice que la predicación de Cristo y los apóstoles fue “confirmada” con señales y prodigios (Heb.2:3,4). La confirmación de la que se habla aquí es como la de un sello gubernamental sobre un documento legal; una vez hecha la confirmación, no es necesaria más prueba. Entonces, siendo que la predicación del evangelio fue “confirmada” en el primer siglo, ésta no necesita más confirmación. No hay más necesidad de milagros. Necesitamos decir también que Jesús prometió que toda la verdad sería revelada a los apóstoles (Jn. 13:12,13; Hch. 20:27; 2 Tim. 3:16,17; 2 P. 1:3, Judas 3). La revelación está completa de una vez y por todas. Si este es el caso, entonces no hay necesidad de señales milagrosas hoy día.

En segundo lugar, los dones espirituales, milagrosos fueron dados a los apóstoles directamente por Cristo mismo (Mt. 3:11; Hch. 1:1-8). En Hechos 2 el Espíritu Santo fue en realidad derramado sobre los apóstoles. Pablo mismo recibió su apostolado y poder de Jesucristo (2 Cor.11:5; Gal. 2:11-17); Pablo demostró las “señales” de apóstol (2 Cor. 12:12). Las únicas personas “bautizadas con el Espíritu Santo”, aparte de los apóstoles, fueron Cornelio y su casa (Hch. 10 – 11:1-18). Sin embargo esto sucedió antes que Pedro les empezara a predicar, antes que fueran creyentes de Cristo (Hch.11:4,15). Este bautismo con el Espíritu Santo sucedió para convencer a los judíos y a Pedro que a los Gentiles se les concedía también el arrepentirse (Hch.11:15-18). Nadie más es mencionado en la Biblia que tuviese el poder de obrar milagros a no ser por la imposición de las manos de los Apóstoles (Hch. 2:43; 3:6; 5:12-15; 6:5-8; 8:5,6). Una lectura detallada de Hechos 8 nos enseñará que a pesar que Felipe había recibido poder de los apóstoles, él no podía pasarlo a los Samaritanos. Solo los apóstoles podían dar estos poderes a otros. (Nota: vea también Hechos 19:6 y 2 Timoteo 1:6). Si solo los apóstoles podían dar estos dones milagrosos, entonces después que los apóstoles murieron y después que aquellos sobre los cuales los apóstoles impusieron sus manos murieron, los dones milagrosos dejaron de existir. Esto sería el final del propósito de las señales; La confirmación de la palabra. Juan, el último de los  apóstoles en morir, dejó la última revelación de la palabra de Dios, por lo tanto no más necesidad de milagros.

En tercer lugar, Pablo asevera claramente que los dones milagrosos cesarían en 1 Corintios 13:8-13. Pablo utilizó tres capítulos en I Corintios para discutir sobre los dones milagrosos. A la mitad de esta discusión él declara que el amor es más importante que cualquier otro don (13:1-3), luego él describe el amor (13:4-7). En la parte final del capítulo (13:8-13), él demuestra que el amor es más grande porque durará más que los dones espirituales. Pablo dijo, “Pero la profecía acabará, y cesarán las lenguas, y la ciencia (dada milagrosamente) acabará.” Estos dones hicieron que Pablo dijera que “Porque en parte conocemos, y en parte profetizamos; mas cuando venga lo perfecto, entonces lo que es en parte se acabará” (9,10). Este texto dice que los dones cesarían cuando “venga lo perfecto.”

Pero ¿Qué es “lo perfecto”? “Perfecto” en el NT significa completo. Esta palabra es un contraste con las frases “en parte conocemos, y en parte profetizamos.” La frase “en parte” se refiere a la ciencia (conocimiento según versiones modernas) y a la profecía, dadas de forma milagrosa, que revelaban la Palabra de Dios de forma oral. Es, entonces, lo más natural llegar a la conclusión que lo completo o lo “Perfecto” es la completa revelación de Dios dada a los hombres en la forma escrita del Nuevo Testamento. Esta revelación de la voluntad de Dios, “la fe dada una vez a los santos” (Judas 3), vino a estar en posesión general aproximadamente al final del primer siglo. Cuando lo perfecto (completo; todo el NT) vino, lo que era en parte (dones espirituales) acabó. Entonces, ya que los registros del NT, la voluntad de Dios, están completos (2 Tim. 3:16,17; 2 Pe. 1:3), no hay más necesidad de dones milagrosos en el siglo veintiuno para darnos más revelación. 

En cuarto lugar y la última razón por la cual negamos los dones milagrosos hoy viene por la experiencia con los que dicen tener estos dones. Así como había diferencia entre Simón el mago y Felipe en Hechos 8:5-13, también hoy hay diferencia entre los llamados sanadores y los milagros que Jesús y Sus apóstoles hicieron. Notemos algunas cosas de los milagros bíblicos:

(1) Jesús sanó a todos los que venían a Él sin fallar (Mat. 4:23, 24; 8:16; 9:35; 12:15; 14:34-36; 15:29-31; Hch.5:16).

(2) Jesús sano a todos completamente; ninguno regresó a él días después con algunos pocos sufrimientos. Los minusválidos, personas que habían perdido brazos, piernas u ojos recuperaban sus miembros a través de la sanación. Todo esto para que la multitud pudiera ver los cambios físicos inmediatos (Mat. 15:29-31; Marcos 7:31-37; Jn. 7:23; Hch. 3:7-11). Hoy tenemos muchas personas mutiladas de alguna pierna o brazo, están minusválidas (ver Mat. 15:29-31; 18:8,9.) y ¿quién les está regresando sus piernas o brazos? ¡Yo sé que nadie lo hace!

 (3) Los enemigos de Jesús admitían que Él podía hacer Milagros (Juan 11:46-48; Hch.4:16), pero hoy los sanadores son considerados por sus opositores como fraudes.

(4) Jesús y sus apóstoles no usaron sus poderes milagrosos para hacerse ricos como Simón el mago hizo y como algunos hacen hoy (Mat. 10:8-10; Hch. 3:16). Los apóstoles obtenían lo que necesitaban de su trabajo, y aun así no vivían espléndidamente. (Vea I Corintios 9). 

 (5) Jesús no requería que una persona estuviera presente en el servicio de sanación para ser sanada. Él podía sanar desde lejos (Mat. 8:5-13). 

 (6) Jesús no requería fe de cada uno antes de que Él los sanara; algunos no creían y otros no podían creer, porque estaban muertos (Lc. 7:11,12; 8:54,55). Jesús obraba milagros para causar que la gente creyera en él, no porque ya creían (Juan 11:42; 20:30,31; Hch. 13:11,12). Jesús nunca dijo que no podía obrar milagros porque había incrédulos presentes. Jesús nunca dio excusas, pues Él sanaba a todos. Algunos hoy dicen poder sanar pero fallan y luego buscan excusas por sus fallas. La verdad es que en realidad nunca tuvieron el poder para sanar.

 (7) Jesús no requería  de conmovedoras emociones o una atmosfera especial para sanar a alguien, pero los modernos fingidos sanadores, siempre las requieren para hacerlo.

 (8) Los apóstoles no se exaltaban a sí mismos, ni utilizaban su poder para formar una nueva denominación. Más bien, ellos se aseguraban de apuntar a Cristo y a la única verdadera iglesia por la cual Él murió. Ellos estaban en contra de la división a diferencia de los modernos sanadores.

La misión del Espíritu Santo fue de guiar a los apóstoles a toda verdad (Juan 16:12,13). El Espíritu Santo no miente; tampoco puede decirle una cosa a una persona y otra cosa diferente a otra. El Espíritu Santo no causa confusión (1 Cor. 14:33). Él habla de un solo evangelio (Gal. 1:6-9) y nos ha dado una sola fe (Ef. 4:5), pero los que dicen ser inspirados y supuestamente hacen milagros están en desacuerdo entre sí mismos sobre lo que Dios les ha revelado. A menudo contradicen lo que está claro concerniente a la enseñanza del bautismo, del plan de salvación, de Jesucristo y de la naturaleza de la Iglesia. Ellos, también, rompen los mandamientos de Dios al tener a mujeres predicando (1 Cor. 14:34-37; 1 Tim. 2:8-11). 

¿Acaso guía el Espíritu Santo a los hombres a desobedecer las claras enseñanzas de la palabra de Dios? Estas no son las obras del Espíritu Santo sino del Diablo (Mat. 7:15-23; 2 Cor. 11:13-15; 2 Tes. 2:8-12). A veces los falsos maestros tienen poderes también. Dios les da este poder para probarnos y ver si seguimos Su Palabra (Dt. 13:1-5). Si un hombre enseña un evangelio que es diferente del verdadero evangelio, el tal es anatema (puesto en maldición) (Gal. 1:6-9). Si un hombre no tiene la doctrina de Cristo, el tal no tiene a Dios y no debe ser seguido ni ayudado (2 Juan 9-11). Cristianos, ¡Tengamos cuidado! 

Estudiemos la Palabra de Dios y examinemos todo (1 Tes. 5:21,22; 2 Tim. 2:15). Siempre sigamos las enseñanzas de Jesús en el Nuevo Testamento (Juan 12:48), porque en realidad él tiene todo el consejo de Dios, todo lo que pertenece a la vida y a la piedad, y es capaz de nutrir al hombre a toda buena obra (Hch. 20:27; 2 Tim. 3:16, 17; 2 Pe. 1:3). 

Entonces, ya que tenemos toda la Palabra de Dios, no necesitamos de los dones milagrosos hoy día. 

{ 3 comentarios ... Leelos o Comenta }

  1. Exelente mi hermano, Dios permita que muchos hoy puedan abrir sus ojos a la vardad y dejar de ir en pos de espiritus engañadores.
    Este tema me parece que tiene una buena exégesis y con una explicación muy clara.
    Dios bendiga sus esfuerzos por demostrar a los tenerosos de Dios la verdad.
    Francisco González

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  2. Gracias por escribir hermano Francisco. Estamos haciendo todo lo posible por Defender el Evangelio a toda costa. Si tiene algún tema que podamos compartir en formato de artículo solo hagamelo saber y con mucho gusto lo compartimos en esta web.

    Saludos y Dios le bendiga.

    P.S. Si quiere recibir actualizaciones de lo que sucede en esta web suscríbase ingresando su correo electrónico justo arriba a la derecha..

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  3. Que falacía NO NECESITAMOS LOS DONES MILAGROSO HOY EN DIA, lo cual se puede notar que en su congregación es una iglesia muerta , pobre (espiritualmente) , o sea jamás ha visto el poder de Dios ? lo compadezco sr. quiere saber que YHWH todavía se manifiesta , haga ayunos sin entregar por lo menos 10 días , busque santidad por que es el ÚNICO camino a Dios, cuando salga de esos ayunos, escriba en este blog y me dice si es el mismo, Dios cambia pero a un corazón humillado, busque a Dios pero de verdad no por dinero como el sr, ese de la tv , que tampoco es Cristiano igual que ud. si nunca le ha confirmado el Espíritu Santo que es hijo de Dios Precúpese por que si su Justicia no es mayor a la de los Fariseos (Mat 5-20), y no todos los que hacen grandes prodigios viene de Dios como este benny Hinn ,pero Jesús no ha dejado de obrar en sus dones, no los niegue solo por que su iglesia sea una iglesia mundana no quiere decir que Dios no actúa en su verdadera Iglesia.por que no ha creído en su PLENITUD en Jesus,Jua 14:12 De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo voy al Padre.
    Mar 16:17 Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas;
    Mar 16:18 tomarán en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos pondrán sus manos, y sanarán.
    Busque la verdad mientras aún pueden , digale a su congregación que no se vistan como prostitutas , fuera todo adorno de vanidad, mujeres vestidas con vestuario de mujer , hombres varoniles (no afeminados)no predique por ganancía, , esfuércese por hacer una congregación Santa para digna de ser llamada Cristiana y verá que en lugar de negar los Dones espirituales será un defensor como yo , por que ha sido testigo del mismo Dios que no cambia NUNCA ,somos nosotros los que hemos cambiado en la forma de adorar a el Inmutable Jesús.

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